viernes, 29 de mayo de 2020

Roca de Salvación y de Tropiezo - Estudio de MATEO VI - (Mt 11 y 12)

(Nota: Los párrafos en negrita son un resumen de los versículos bíblicos estudiados (identificados al pie de cada párrafo); los textos en cursiva son los comentarios hechos por mí respecto de esos textos. Para ir al link de respaldo bíblico o de apoyo, hacer click en los enlaces.)

[Empezar en Mateo Primera Parte]


JESÚS, EL UNGIDO DE JEHOVÁ


Desde la cárcel, Juan Bautista envió a dos de sus discípulos a preguntar a Jesús "¿Eres tú aquel que había de venir o esperaremos a otro?". Jesús respondió: "Los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos son resucitados, y a los pobres es anunciado el evangelio", y agregó "bienaventurado es el que no halle tropiezo en mí". (11:1-6)

* Como vemos, Jesús no respondió con un sí, pero en su respuesta les hizo ver que en Él se cumplía lo que estaba escrito en los textos sagrados sobre el Mesías: "me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel" (Is 61:1); "los ojos de los ciegos serán abiertos, y los oídos de los sordos se abrirán. Entonces el cojo saltará como un ciervo, y cantará la lengua del mudo..." (Is 35:5-6); "los sordos oirán las palabras del libro, y los ojos de los ciegos verán en medio de la oscuridad y de las tinieblas" (Is 29:18), entre otras profecías.

** ¿Quiénes hallaron tropiezo en Cristo? La mayoría de los judíos; en especial, aquéllos que se creían expertos en la Ley y los profetas, porque fueron incapaces de discernir los tiempos, y de reconocer que ante sus ojos estaba aquel tan esperado Ungido del que hablaban las Escrituras. Jesús fue la piedra de tropiezo de aquellos a quienes se les dio la misión de edificar la casa de Dios, y que no tuvieron la capacidad de apreciar cuán valiosa era esa piedra, que iba a ser puesta como cabeza del ángulo del Templo de Dios en la tierra, y la rechazaron. Pero también estaba escrito que sería así.

Mientras se iban los enviados por Juan, Jesús comentó a sus discípulos que Juan Bautista era más que un profeta, porque a él se refería Malaquías cuando dijo: "He aquí, yo envío mi mensajero delante de tu faz, el cual preparará tu camino delante de ti". Jesús agregó que, de entre los que nacen de mujer, no se ha levantado otro mayor que Juan, sin embargo, dijo, el más pequeño en el reino de Dios es mayor que Juan. También dijo que Juan era el Elías anunciado. Agregó que todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan, y que desde que Juan había comenzado a profetizar, el reino de los cielos había sido atacado violentamente, pues aquella generación  no paraba de criticar: cuando Juan predicaba, decían que tenía demonio, y ahora que el Hijo del Hombre compartía comida y bebida con publicanos y pecadores, lo tildaban de comilón y bebedor. Concluyó diciendo que esa generación era semejante a esas personas que no se inmutan por nada: que no bailan si les tocan música, ni se lamentan si les cantan endechas. Finalmente, dijo que  la sabiduría es justificada por sus hijos. (11:7-19)

* La generación ciega y sorda atacaba y condenaba lo que no calzaba con sus expectativas. Ellos esperaban que el Mesías fuera un guerrero, un príncipe vestido con fino ropaje, y no podían aceptar que ése que decía ser el Mesías proviniera de una familia humilde. A causa de su endurecido corazón, no entendían lo que estaba ante sus ojos, y eran absolutamente indiferentes al anuncio de las buenas noticias que Jesús traía, como tampoco reaccionaban cuando se les hablaba de la condena que aguarda a los que rechazan el mensajeEsa generación se había vuelto necia, y estaba tropezando, pero la Sabiduría de Dios, que se estaba manifestando por medio de la obra de Jesucristo en la tierra, iba a ser justificada por sus resultados. El maravilloso misterio que envolvía la venida del Mesías fue luego plenamente revelado al mundo por el Espíritu, a través de los apóstoles, y por medio de la Palabra inspirada por Dios.

** En cuanto a la venida del precursor del Mesías, he escuchado a algunos respetados predicadores decir que, en estos versos, Jesús está anunciando una segunda venida de Elías antes de la segunda venida de Jesús, primero, porque el texto original dice: "él es Elías, el que ha de venir" y, segundo, porque Malaquías dice: "Yo les envío al profeta Elías antes que venga el día del Señor, día grande y terrible", interpretando "el día del Señor" como el día del juicio, y no como la primera venida del Mesías, quien dijo que había venido a traer disensión y espada, y no paz, que es lo que el profeta señala como "día grande y terrible". Ese error de interpretación, a mi juicio, les ha llevado a sacar cálculos errados en lo referente a los tiempos escatológicos.

*** Algunas profecías en cumplimiento:
  • Mal 3:1 He aquí, yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí; y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis, y el ángel del pacto, a quien deseáis vosotros. He aquí viene, ha dicho Jehová de los ejércitos.
  • Mal 4:5 He aquí, yo os envío el profeta Elías, antes que venga el día de Jehová, grande y terrible.
  • Is 53:1 ¿Quién ha creído a nuestro anuncio? ¿y sobre quién se ha manifestado el brazo de Jehová?
  • Is 28:16 por tanto, Jehová el Señor dice así: He aquí que yo he puesto en Sion por fundamento una piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable; el que creyere, no se apresure.
  • Is 61:1  El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel;


IGNORAR A JESÚS ES CONDENACIÓN


Entonces Jesús comenzó a reprender a las ciudades donde había estado, que no habían mostrado arrepentimiento. Dijo que, si en las ciudades gentiles de Tiro y Sidón se hubieran hecho los milagros que se hicieron en Corazín y Betzaida, sin dudas se habrían arrepentido, por tanto, con seguridad el castigo para los judíos será peor que el de esas ciudades paganas. Lo mismo para Capernaum, que se exaltaba hasta los cielos, iba a ser abatida hasta el infierno, porque si tantos milagros se hubieran hecho en Sodoma, como los que se habían hecho en Capernaum, Sodoma se hubiera arrepentido y aun permanecería, por tanto, el castigo reservado para Capernaum será peor que el de SodomaLuego, Jesús oró: "Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y de los entendidos, y las revelaste a los niños. Sí, Padre, porque así te agradó". (11:20-26)

* Tiro y Sidón eran ciudades gentiles, que tuvieron gran esplendor, pero que fueron devastadas por poderosos pueblos a causa de su pecado, lo que había sido profetizado con antelación. Jesús las pone como ejemplo, porque el privilegio que tenían los judíos, de estar en presencia del Redentor de la humanidad, quien se daba a conocer con todo tipo de señales y maravillas, cumpliendo las Escrituras que ellos conocían, estaba siendo despreciado por el pueblo escogido por Jehová, lo que los condenaba. El ministerio terrenal de Jesús no incluía a los gentiles, sin embargo, muchos de ellos, que presenciaron sus milagros, y oyeron la palabra que les hablaba, creyeron, y se arrepintieron de sus pecados. Más de un ejemplo encontramos en el Nuevo Testamento, sobre gentiles que se acercaron a Jesús y fueron beneficiados por un milagro a causa de su fe.

** Los niños a que Jesús se refiere no sólo eran aquellos judíos de origen humilde que Jesús había llamado a su ministerio, sino también todos los gentiles que se sentían atraídos por el Hijo de Dios, porque veían que tenía autoridad cuando hablaba verdades espirituales que hasta entonces ellos habían ignorado. En cambio, aquellos que conocían las Escrituras, los maestros de la ley, no pudieron ver la luz del evangelio

*** Algunas profecías en cumplimiento:
  • Sal 8:2 De la boca de los niños y de los que maman, fundaste la fortaleza, a causa de tus enemigos, para hacer callar al enemigo y al vengativo.
  • Is 28:9 ¿A quién se enseñará ciencia, o a quién se hará entender doctrina? ¿A los destetados? ¿a los arrancados de los pechos?
  • Sal 102:18 Se escribirá esto para la generación venidera; y el pueblo que está por nacer alabará a JAH,
  • Gn 48:19 Mas su padre no quiso, y dijo: Lo sé, hijo mío, lo sé; también él vendrá a ser un pueblo, y será también engrandecido; pero su hermano menor será más grande que él, y su descendencia formará multitud de naciones.
  • Is 65:1-2 Fui buscado por los que no preguntaban por mí; fui hallado por los que no me buscaban. Dije a gente que no invocaba mi nombre: Heme aquí, heme aquí. Extendí mis manos todo el día a pueblo rebelde, el cual anda por camino no bueno, en pos de sus pensamientos;
  • Is 65:12-15 yo también os destinaré a la espada, y todos vosotros os arrodillaréis al degolladero, por cuanto llamé, y no respondisteis; hablé, y no oísteis, sino que hicisteis lo malo delante de mis ojos, y escogisteis lo que me desagrada. Por tanto, así dijo Jehová el Señor: He aquí que mis siervos comerán, y vosotros tendréis hambre; he aquí que mis siervos beberán, y vosotros tendréis sed; he aquí que mis siervos se alegrarán, y vosotros seréis avergonzados; he aquí que mis siervos cantarán por júbilo del corazón, y vosotros clamaréis por el dolor del corazón, y por el quebrantamiento de espíritu aullaréis. Y dejaréis vuestro nombre por maldición a mis escogidos, y Jehová el Señor te matará, y a sus siervos llamará por otro nombre.

También dijo que el Padre le había entregado todo en sus manos, y que sólo el Padre conoce al Hijo, y que nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y a quien el Hijo quiera revelarlo. (11:27)

* En el Antiguo Testamento vemos muchas veces que Jehová dice que Él mismo hará cosas que después vimos que Jesús las hizo, esto es porque Jehová estaba en Jesús haciendo todas las cosas. Por ejemplo, con respecto a reunir a las ovejas en un sólo redil, Jehová dijo por medio de Ezequiel: "He aquí yo, yo mismo iré a buscar mis ovejas, y las reconoceré" (Ez 34:11); "Yo apacentaré mis ovejas, y yo les daré aprisco, dice Jehová el Señor. Yo buscaré la perdida, y haré volver al redil la descarriada; vendaré la perniquebrada, y fortaleceré la débil; mas a la engordada y a la fuerte destruiré; las apacentaré con justicia" (Ez 34:15-16); "Yo salvaré a mis ovejas, y nunca más serán para rapiña; y juzgaré entre oveja y oveja" (Ez 34:22). Pero también dijo que iba a designar a un Pastor para hacer eso: "Y levantaré sobre ellas a un pastor, y él las apacentará; a mi siervo David, él las apacentará, y él les será por pastor. Yo Jehová les seré por Dios, y mi siervo David príncipe en medio de ellos. Yo Jehová he hablado" (Ez 34:23-24). Porque Jehová se propuso reunir todas las cosas, las del cielo y las de la tierra, en el Hijo del Hombre, Jesucristo, quien reinará hasta que haya puesto a todos sus enemigos bajo sus pies, luego de lo cual, entregará todo al Padre para que Dios sea todo en todos.

Personalmente, prefiero no usar el término "trinidad", porque es una palabra que no aparece en la Biblia, y, tratándose de una expresión introducida por hombres, ha llevado a confundir a muchos. Por ejemplo, no pocas veces he escuchado a personas afirmar que María es la madre de Dios, o que Dios murió en la cruz. Si mi conciencia me acusa en ese sentido, prefiero obedecerla. Sin embargo, la pluralidad del Dios vivo es fácilmente reconocible cuando escudriñamos las Escrituras. Al respecto, bueno es tener en cuenta que, la Palabra dice que Jesús es el Hijo de Dios, y que Jehová es cabeza del Hijo, y que el Padre mayor es que el Hijo, pero también dice que son UnoEl Hijo del Hombre era Emanuel, esto es, Dios con nosotros, porque Jesús era Dios salvandoJesús salió de Dios, y todo lo que Jesús hizo, lo hizo porque el Espíritu Santo de Jehová estaba en ÉlLas Escrituras lo afirman: Dios estaba en Jesucristo reconciliando consigo al mundo


EL REPOSO DEL PUEBLO DE DIOS


Jesús dijo: "Llevad mi yugo sobre vosotros". Llamó a todos los que están agobiados y cargados a venir a Él, porque en Él hallaremos descanso. Exhorta a sus discípulos a aprender de Él, que es manso y humilde de corazón, para hallar descanso para sus almas, porque su yugo es fácil de llevar, y su carga es liviana. (11:28-30)

* La palabra cónyuge, que usamos para referirnos a los esposos, significa "con yugo". Lo que vemos aquí es la "proposición de matrimonio" del Hijo de Dios a su amada Jerusalén celestial, por la cual, se dio a sí mismo, para presentársela sin mancha, santa. La iglesia es la novia del Cordero, cuyas bodas se celebrarán cuando la primera tierra ya no exista más, y haya cielo nuevo y tierra nueva. Ahora es tiempo de recibir con júbilo la invitación a las bodas del Cordero, y de prepararnos para asistir con nuestras mejores vestiduras, de acuerdo a la ocasión.
 
** Sólo en Jesús encontramos descanso para nuestras almas. Cuando nos sometemos a su Señorío, Él pone su yugo sobre nuestra cerviz, y comienza a guiarnos por camino de santidad. Es un yugo liviano, que no pesa, porque Él lo controla, no nosotros. Nuestra confianza ya no está en razonamientos humanos, sino en el que todo lo sabe. Ya no caminamos solos, porque cuando Jesús ascendió a la diestra de Dios, envió su Espíritu Santo a morar dentro de nuestro corazón, y es Él quien nos guía, aconseja, corrige, enseña, exhorta, y nos limpia de toda nuestra inmundicia. Jesucristo, por medio de su Espíritu Santo, es nuestro Pastor que, con su cayado, nos lleva por el buen camino. Nuestra fuerza procede del Espíritu del Señor, a quien debemos entregar las riendas de nuestras vidas.

Un día de reposo, iba Jesús con sus discípulos por un campo, y tuvieron hambre, y los discípulos comenzaron a arrancar espigas y a comer. Entonces los fariseos, que seguían a Jesús por todas partes, le preguntaron por qué permitía que sus seguidores violaran el día de reposo, arrancando esas espigas. Pero Jesús les recordó la historia de David cuando, junto a sus guerreros, tuvieron hambre, y llegaron a la casa de Dios, y comieron el pan de la proposición que estaba reservado sólo para los sacerdotes. Por otra parte, también les dijo que debían reconocer que, según la ley, los sacerdotes deben cumplir con sus turnos en el templo en día de reposo, y eso no significa que violen la ley, y agregó: "Uno mayor que el templo está aquí", refiriéndose a sí mismo. Además, les dijo que, si comprendieran el significado de las palabras del profeta, cuando dijo: "Misericordia quiero, y no sacrificio", no andarían condenando a los inocentes. Y les declaró que "el Hijo del Hombre es Señor del día de reposo". (12:1-8

Jehová mandó a los hebreos a santificar el día de reposo, que es el último día de la semana, correspondiente a sábado en el calendario hebreo, a fin de conmemorar el día en que YHWH descansó, luego de haberse dedicado los seis días anteriores a la obra de la creación. Ningún trabajo podía realizarse aquella jornada, que comenzaba desde que se ponía el sol (lo que para nosotros es viernes), hasta la siguiente puesta de sol. Espiritualmente hablando, Jesús es nuestro reposo. El capítulo 12 de Mateo no debe leerse aparte del capítulo 11, porque, si bien parecen ser eventos separados, creo que la intención del autor era enfatizar que, además de cargar con nuestros agobios, Jesús vino para llevar sobre sí toda la carga de nuestro pecado, y así darnos reposo. Sólo en Cristo somos verdaderamente libres del pecadoSi bien Jesús no había aún dado su vida en rescate, ya estaba en medio de sus escogidos, quienes habían hallado reposo para sus almas a través de la santificación que Jesús practicaba en ellos por medio de la palabra que les enseñaba. Jesús es el Señor del séptimo día, porque los que por la fe renunciamos a seguir llevando carga de pecado, somos limpiados por su sangre, y entramos en su reposo; mas el que no cree no tendrá descanso jamás, ni en esta vida ni en la venidera. 

** En el texto de la Septuaginta (la primera versión en griego de la Biblia, en la cual se basan todas las versiones disponibles), la respuesta de David al sacerdote, que dijo que les daría el pan sagrado sólo si se habían abstenido de intimar con mujeres los días previos, fue: «Pero de mujer nos hemos abstenido ayer y anteayer; poniéndome yo en camino, se han hecho, todos los jovencillos, purificados; y este camino, profano; por esto santificado será hoy por los vasos míos» (1Sa 21:5 LXX). En otras palabras, David, que está representando en esta escena un tipo de Jesús, está diciendo que, por el sólo hecho de estar Él en medio de los jóvenes que le acompañaban, habiéndoles enseñado a guardarse, ellos se habían purificado y, lo que hasta entonces se consideraba profano, por medio de estos que le acompañaban, que ahora estaban purificados por la intervención (las enseñanzas recibidas) de quien estaba entre ellos, ahora se había hecho puro. La sola presencia de Jesús, que es más que el templo, santificaba todo lo que antes se consideraba inmundo. Los apóstoles, los vasos que estaban llenos de la Verdad, habían sido lavados de toda inmundicia por las palabras que Jesús les había enseñado

En este contexto, creo que el día de reposo que Jehová mandó a los hebreos guardar tenía por propósito primordial el obligarlos, al menos por un día, a abstenerse de lo profano, y consagrarse a lo espiritual; pero ese mandato era para el tiempo de la ley. Los que hemos sido purificados por la sangre de Jesús tenemos que dar fruto de santificación todos los días, lo cual no significa que se nos exija mayor esfuerzo, porque lo cierto es que a los de la ley se les mandaba hacer el mismo esfuerzo sin Cristo, lo que es imposible de cumplir ni por un día. Pero nosotros contamos con la ayuda del Espíritu Santo, quien produce en nosotros el querer como el hacer, por su buena voluntad; además, en Cristo podemos obedecer, porque hemos sido libertados de la esclavitud del pecado.


De allí, Jesús vino a la sinagoga, donde los judíos le presentaron a un hombre que tenía la mano seca, y le preguntaron: "¿Es lícito sanar en el día de reposo?". Él les contestó que nadie dejaría de rescatar a una oveja si ésta cayera en un pozo un shabat; pues mucho más valor tiene la vida de un hombre que la de una oveja, por tanto, sí es lícito sanar en día de reposo. Entonces, pidió al hombre que extendiera su mano, y lo sanó. Al ver esto, los fariseos salieron de allí, y se reunieron para planificar cómo acabar con Jesús. (12:9-14)

** Algunas profecías en cumplimiento:
  • Lv 16:22 aquel macho cabrío llevará sobre sí todas las iniquidades de ellos a tierra inhabitada; y dejará ir el macho cabrío por el desierto.
  • Is 53:5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.
  • Is 53:6 Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.

LA SALVACIÓN ES PARA TODOS


Como Jesús sabía lo que había en los corazones de los judíos, se alejó de la sinagoga, y mucha gente, de distintos orígenes, iba tras Él. Él sanaba a todos los que se le acercaban, pero les pedía que no comentaran con nadie lo que estaba haciendo. Así se cumplía lo dicho por el profeta Isaías, que anunciaba que el siervo de Dios, lleno de su Espíritu, traería buenas nuevas a los gentiles: "He aquí mi siervo, a quien he escogido; mi Amado, en quien se agrada mi alma; pondré mi Espíritu sobre él, y a los gentiles anunciará juicio. No contenderá, ni voceará, ni nadie oirá en las calles su voz. La caña cascada no quebrará, y el pábilo que humea no apagará, hasta que saque a victoria el juicio. Y en su nombre esperarán los gentiles". (12:15-21)

Aunque el ministerio de Jesús era de rescatar a las ovejas extraviadas de Israel, también esperaba que los gentiles vieran las obras que Él hacía, y dejaran de confiar en sus ídolos de piedra y madera. En el capítulo 42, Isaías dice: "guiaré a los ciegos por camino que no sabían, les haré andar por sendas que no habían conocido; delante de ellos cambiaré las tinieblas en luz, y lo escabroso en llanura. Estas cosas les haré, y no los desampararé"; "Sordos, oíd, y vosotros, ciegos, mirad para ver". Los ciegos y sordos eran esencialmente los gentiles, es decir, no judíos, aquéllos que no habían tenido acceso a la ley de Jehová, que nunca habían visto ni oído la Verdad, pero que ahora, por las palabras de Jesucristo, sus ojos y sus oídos fueron abiertos, y pudieron conocer los caminos hacia la santidad para ser salvos. Sin embargo, había también un gran número de judíos que habían sido cautivados por las costumbres de sus conquistadores paganos, y se habían vuelto sordos, ciegos y paralíticos en cuanto a la Verdad. Ellos también necesitaban ser sanados.

** Algunas profecías en cumplimiento:

  • Is 42:1-4 He aquí mi siervo, yo le sostendré; mi escogido, en quien mi alma tiene contentamiento; he puesto sobre él mi Espíritu; él traerá justicia a las naciones. No gritará, ni alzará su voz, ni la hará oír en las calles. No quebrará la caña cascada, ni apagará el pábilo que humeare; por medio de la verdad traerá justicia. No se cansará ni desmayará, hasta que establezca en la tierra justicia; y las costas esperarán su ley.
  • Is 42:16-17 Y guiaré a los ciegos por camino que no sabían, les haré andar por sendas que no habían conocido; delante de ellos cambiaré las tinieblas en luz, y lo escabroso en llanura. Estas cosas les haré, y no los desampararé. Serán vueltos atrás y en extremo confundidos los que confían en ídolos, y dicen a las imágenes de fundición: Vosotros sois nuestros dioses.

ATANDO AL ENEMIGO


Entonces, trajeron hasta Jesús a un endemoniado sordo y ciego, y Él lo sanó. La gente atónita se preguntaba si Aquél sería el Mesías, pero los fariseos se atrevieron a decir que Jesús echaba fuera los demonios por el espíritu del príncipe de los demonios. Sabiendo Jesús lo que ellos comentaban, les respondió que todo reino dividido es fácilmente asolado, por tanto, Satanás no puede echar fuera a Satanás, porque si fuera así, su reino no podría permanecer. Además,  cabía preguntarse si los judíos que expulsaban demonios lo hacían por el espíritu de Satanás. Dicho esto, Jesús les hizo ver que, si Él estaba expulsando demonios por el Espíritu de Dios, era evidencia de que el reino de los cielos se había acercado, y ejemplificó sus argumentos, diciendo: "¿cómo puede alguno entrar en la casa del hombre fuerte, y saquear sus bienes, si primero no le ata?". También dijo: "El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no recoge, desparrama". (12:22-29)

¿A quién ató Jesús para poder saquear sus bienes? A Satanás, el espíritu bajo cuya influencia está el mundo. Sólo el Espíritu de Dios puede atarle, y Jesús vino para deshacer las obras de Satanás. Todos los milagros hechos por Jesús demostraron que Satanás era impotente ante el poder del Espíritu de Dios actuando por medio del Hijo del Hombre. En el primer siglo, el Apóstol Pablo dijo  que ya estaba en acción el misterio de la iniquidad, pero que hay una persona que lo detiene; mas cuando ese "alguien" que lo detiene sea quitado de en medio, entonces se manifestará el inicuo que será destruido por el Señor. En Apocalipsis, se dice que Satanás sería atado por mil años, luego de los cuales va a ser soltado. A la luz de estas revelaciones, podemos interpretar que Satanás está siendo detenido por el Espíritu Santo que se manifiesta a través del cuerpo de Cristo. Mientras el cuerpo de Cristo (la iglesia) permanezca en la tierra, Satanás está limitado en su accionar, pero cuando Jesús saque a su Iglesia de este mundo, entonces Satanás será soltado, y se manifestará a través del líder (la bestia) que organizará a las naciones para luchar contra el Cordero; pero será vencido.


LA BLASFEMIA CONTRA EL ESPÍRITU SANTO


Dijo, entonces, Jesús: "Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada. A cualquiera que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el venidero". Les dijo que por el fruto se conoce el árbol; porque un árbol bueno no puede dar fruto malo, ni el árbol malo dar fruto de buena calidad. Y dirigiéndose a los fariseos les dijo que eran una "generación de víboras", que estaba imposibilitada de dar fruto de buena calidad, porque "de la abundancia del corazón habla la boca. El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas". Dijo que, en el día del juicio, tendremos que responder por cada palabra inútil que salga de nuestra boca, pues por ellas seremos declarados justos o seremos condenados. (12:30-37)

Como dije anteriormente, no uso el término "trinidad", aun cuando tengo absoluta convicción de que Dios estaba en Jesús, y que Jesús era la imagen de la sustancia de Dios, pues la Palabra inspirada lo afirma, así como sé que hablar del Espíritu Santo es hablar de Dios, que es Espíritu. Creo que simplificar el Nombre de Dios, del Hijo y del Espíritu Santo en la palabra "trinidad" no ha hecho más que entorpecer nuestra limitada comprensión de la naturaleza divina.

Otra imprudencia que se ha cometido con el santo Nombre de Dios, (que en los textos sagrados originales aparece como YHWH, Jehová o Yahveh), es haberlo reemplazado por "Señor" en las traducciones modernas de la Biblia, ignorando que en el Nombre de Dios están comprendidos todos sus atributos. Creo que  haber intervenido de esa manera la Palabra inspirada es algo de lo cual habrá que rendir cuentas, en especial, si en la oración que Jesucristo nos enseñó, nos hizo ver que nuestra primera necesidad es que Su Nombre sea santificado. Dijo Jehová a Moisés: "Así dirás a los hijos de Israel: Jehová, el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob, me ha enviado a vosotros. Este es mi nombre para siempre; con él se me recordará por todos los siglos" (Ex 3:15).

** El Espíritu Santo no es una fuerza, sino, Dios en acción, por tanto, blasfemar contra Él, es blasfemar contra Dios. Fijémonos cómo Pablo habla indistintamente del Espíritu Santo como si fuera de Dios y de Cristo: "Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él. Pero si Cristo está en vosotros, el cuerpo en verdad está muerto a causa del pecado, mas el espíritu vive a causa de la justicia. Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros". (Ro 8:9-11 RVR).


SEÑAL A LOS INCRÉDULOS


Entonces, los fariseos y escribas demandaron una señal de Jesús, pero Él les respondió que sólo se les daría la señal de Jonás, porque tal "como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches". Les advirtió que su pecado era mayor que el de Nínive, porque los de ese pueblo se arrepintieron tras la predicación de Jonás, y quien les estaba hablando mayor es que Jonás. Incluso, la reina del sur condenará a esta generación, porque ella viajó de lejos para oír la sabiduría de Salomón, y quien les estaba diciendo estas palabras, mayor es que Salomón. (12:38-42)

* El ejemplo del profeta Jonás se refería a la muerte y resurrección de Jesús. Jonás es uno de los llamados profetas menores, no porque sea menos relevante que los otros, sino porque que su profecía tiene pocos capítulos. Jehová había enviado a Jonás a predicar arrepentimiento a los de Nínive, una ciudad gentil que, según el razonamiento de Jonás, no merecía que se les diera la oportunidad de arrepentimiento. Entonces, se embarcó con la intención de huir de la responsabilidad que el Señor le había dado, pero, como Dios no puede ser burlado, vino maldición sobre la embarcación, cuyos viajeros, al descubrir que Jonás era el motivo, lo tiraron por la borda al mar, pero Jehová había preparado un gran pez que tragó al profeta, quien estuvo dentro del vientre tres días y tres noches, luego de lo cual, el pez lo vomitó. Jonás finalmente cumplió con lo mandado, y predicó en Nínive, los cuales procedieron al arrepentimiento, y Jehová los perdonó. 

** Cuando Jesús murió en la cruz, dicen las Escrituras que descendió a las partes más bajas de la tierra, y predicó a los espíritus encarcelados, aquéllos que desobedecieron, y motivaron que Noé, en obediencia a Jehová, hiciera el arca, porque la maldad que se había esparcido por toda la tierra iba a ser destruida (1 Pe 3:18-20). Jesús estuvo muerto, pero ahora vive eternamente, y tiene en su poder las llaves del Hades (Ap 1:18). Luego de visitar las profundidades de la tierra, resucitó y ascendió a los lugares celestiales, y repartió dones a sus escogidos, a fin de perfeccionar a los santos para edificar su iglesia. Él es Señor de vivos y de muertos. El Padre dispuso que todo quedara sujeto a Jesucristo, y cuando todo sea sujeto al Señor, Él mismo se sujetará a Dios, y Dios será todo en todos. Ahora está sentado a la diestra de su Majestad, esperando a que todos sus enemigos sean puestos bajo sus pies

Jesús dijo que, cuando un espíritu inmundo sale del hombre, anda por lugares áridos buscando descanso, y al no hallarlo decide volver a su antigua morada, y la encuentra barrida, desocupada y adornada, entonces va, e invita a siete espíritus peores que él, haciendo que la condición del hombre sea peor que la que tenía al principio. Lo mismo acontecería a esa generación. (12:43-45)

* Las palabras de Jesús no sólo estaban dirigidas a esos religiosos que, obedeciendo a la voz de Satanás, rechazaban la luz que Cristo les ofrecía, sino a todo el que se cree sabio con lo poco que conoce, y no se ocupa en ir a la Palabra inspirada por Dios, para llenarse del conocimiento de Dios. La morada desocupada habla de una persona sin el Espíritu Santo morando dentro de Él. Muchos que se dicen creyentes, no son sino cisternas vacías que, al no contener el agua de vida del Espíritu Santo, son instrumento de muerte en las manos de Satanás que los usa para desviar al pueblo de Dios del camino correcto. Poderosas instituciones religiosas han caído en esa condenación, porque toman los textos divinos y los reinterpretan para que calcen con sus interpretaciones personales, y muchos son extraviados por esos falsos maestros que adaptan la Verdad de la Palabra a sus propias convicciones. Así no entran ellos al reino, pero peor aún, impiden que otros entren

LA FAMILIA DE DIOS


Mientras Jesús hablaba, vino alguien a avisarle que la madre de Jesús y sus hermanos estaban afuera y querían hablar con él; entonces Jesús preguntó: "¿Quién es mi madre, y quiénes son mis hermanos?", y señalando hacia sus discípulos, Él mismo respondió: "He aquí mi madre y mis hermanos", y explicó que los que hacían la voluntad de su Padre que está en los cielos, esos eran sus hermanas, hermanos y madre. (12:46-50)

* Jesús no despreciaba a su familia terrenal, pero consta en la Palabra que, antes de su resurrección, sus hermanos terrenales no creían en Él, y Jesús lo sabía. El linaje celestial es dado por gracia, por la fe en el Hijo de Dios, y todo el que es nacido en la familia de Dios procura hacer la Voluntad de Aquel que le llamó de las tinieblas a su luz admirable. Esta situación, según el evangelio de Marcos, se originó, porque sus familiares, erradamente, creyeron que Jesús estaba fuera de sí cuando discutía con los fariseos, y decidieron ir a buscarle, para sacarlo de en medio de la multitud que se había agolpado en el lugar (Mr 3:20-21, 31). Ellos no estaban precisamente haciendo la voluntad de Dios, sino más bien, interferían con la labor que el Hijo de Dios estaba llevando a cabo.